La pasada Semana Santa, mientras Andrés estaba en la Barswingona, yo volé hacia tierras británicas para asistir a un festival diferente: el Bristol Swing Festival, en la bonita ciudad de Bristol. Es una festival que combina el Lindy Hop con el Circo, en una mezcla que resulta bastante divertida.
Esta vez no puedo hablar de los profesores porque estuve haciendo de voluntario y sólo asistí a los tasters de circo, pero sí diré que me lo pasé pipa en una clase de Jazz Steps con Cat Foley. Qué energía y qué alegría transmite. A veces las clases de Jazz Steps sueles consistir en aprenderse una coreografía que olvidas a la media hora de terminar, pero en esta ocasión, consistió en experimentar en la clase con diferentes acentos, diferentes movimientos, sin una coreografía detrás, por lo que fue muy interactiva y divertida.
Al margen de mi experiencia en el registro de un festival, diré que me encantó tener la posibilidad de probar el trapecio, el tener una taller de handstand (andar haciendo el pino), y había opciones de muchas otras cosas como: Corde Lisse, Chinesse Pole, Silks, Hula Hoop, Acrobalance y alguna otra cosa. Y es que todos los talleres de baile y de circo se celebraban en Circomedia School, una de las escuelas de Circo más reconocidas del Reino Unido, con grandes especialistas en las diferentes artes circenses.
Cuando el número de festivales y la cantidad de oferta disponible en el mundo del Swing es tan amplia, hay que buscar la diferenciación de alguna manera, y creo que ofrecer algo tan loco como clases de circo, es una buena idea. Y buena parte del mérito es de David Zilkha, la cabeza visible de este evento.
Pero el espectáculo no se queda sólo en las clases de circo, por la noche pudimos disfrutar de todo un Cabaret en el que se mezclaban las actuaciones de los profes de baile con los especialistas de circo, en una mezcla espectacular… Muy muy divertido.
Y como no podía ser de otra manera, tenía que haber una competición diferente: una primera Jack´n´Jill estándar en la que hubo cinco parejas que pasaron a la final; y una competición de solo dance, de la que los jueces seleccionaron cinco bailarines… de tal manera que la final consistió en cinco tríos de bailarines bailando en solo y en trío. Un cachondeo que fue superdivertido, y que nos devuelve un poco a la razón primaria por la que estamos aquí en el mundo del Swing: pasarlo bien.
https://www.youtube.com/watch?v=fZ75JzbCsoY
Enhorabuena bristoleños! Hasta el próximo año!